Esta obra presenta los resultados de una investigación llevada a cabo en Medellín (Colombia) por un equipo de profesorado hispano-colombiano, en el marco del Programa de cooperación interuniversitaria e investigación científica de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID), con el apoyo de la Universidad Pablo de Olavide y la Universidad Pontificia Bolivariana. Se aproxima al fenómeno del desplazamiento forzado que sufre la población civil, siendo una de las consecuencias más dramáticas derivadas del conflicto armado existente en el interior de Colombia.

Centra su reflexión en un grupo de mujeres jefas de hogar residentes en Medellín, y en las estrategias de vida que despliegan para hacer frente a las situaciones de adversidad. Ellas son una de las principales víctimas de este conflicto. La perspectiva de género que adopta la investigación lleva a identificar las maneras en que el desplazamiento forzado afecta de manera diferenciada a mujeres y hombres.

A través de sus historias, el texto muestra los daños que causa una guerra que se arraiga en la pobreza y la exclusión social. Los esfuerzos públicos y privados resultan absolutamente necesarios no sólo para reducir el sufrimiento y permitir el acceso de estas mujeres y sus familias a los derechos de ciudadanía, sino también para construir condiciones que permitan la efectiva superación del conflicto y la construcción de una paz duradera.