Diversas fuerzas y motivos obligan a cerca de 125 millones de personas a vivir fuera de su lugar de nacimiento, y provocan que otras decenas de millones se trasladen anualmente del campo a la ciudad dentro de su propio país. Se trata de enormes movimientos migratorios humanos que se han convertido en un barómetro de nuestras variables, y a veces pesimistas, perspectivas de seguridad mundial. En este informe se argumenta que se puede dar más de una solución a los factores que obligan a la gente a huir de su país, al igual que se pueden reducir los desplazamientos no deseados.